La banda estuvo integrada, inicialmente, por Lee Loughnane (trompeta), James Pankow (trombón), Walter Parazaider (saxos, flauta), Robert Lam (voz, piano, órgano), Terry Kath (guitarra, voz), Peter Cetera (bajo, voz) y Danny Seraphine (batería, percusión). Al contrario que BS&T, Chicago mantuvo esta formación bastante estable, a lo largo de su historia.
El grupo se formó en el invierno de 1967, a partir del núcleo de la banda de Kath, Parazaider y Seraphine, que se llamaba The Missing Links, durante una jam session en la Universidad De Paul, cuando se les unieron en el escenario Pankow y Loughnane. El nuevo grupo se llamó The Big Thing, y se completó poco después con Cetera y Lam. Fue éste quien embarcó a la banda en una gira a Los Angeles, donde, ya bajo el nombre de Chicago Transit Authority, cosecharon un inesperado éxito.
Ese mismo año, el productor James William Guercio, decidió tutelarlos y, por ello, renunció a producir el primer disco de BS&T, tal como le había pedido Al Kooper. Sí produjo, sin embargo, el segundo, aunque sólo después de que CBS le hubiese dado luz verde a la grabación del primer álbum de "sus chicos".
La etapa creativa: 1969-1971 [editar]
El primer álbum [editar]
El primer álbum apareció bajo el nombre del propio grupo, Chicago Transit Authority (Columbia, 1969) y se trató de un disco doble. Algunos de los cortes incluidos en este primer álbum doble son esenciales en el sonido del rock americano de finales de esa década: el progresivo y, como se decía entonces, underground I'm a man; la electrizante Free form guitar; temas robustos y sólidos, como Introduction; verdaderas joyas pop como Does anybody really know what time it is? o Beginnings, con su
Ç set final de percusión... El álbum tuvo un impacto mediático enorme y logró índices de venta suficientes en todo el mundo, como para que el grupo realizara una primera gira por Europa, en otoño de 1969.
En España, este primer álbum doble, por razones de cautela comercial de CBS, se publicó como dos álbumes sencillos e independientes entre sí, con varios meses de diferencia: Chicago Transit Authority y I'm a man.
II & III [editar]
Un año más tarde, la banda publicó su segundo álbum doble, bajo el título de Chicago II (1970). Este nuevo disco contenía varios hits, como 25 or 6 to 4, y algunas de sus obras maestras: La suite Ballet for a girl in Buchanan, en siete partes, o el tema Poem for the people. También incluyó una hermosa composición de música contemporánea, compuesta por Terry Kath y orquestada por Peter Maty, llamada Prelude / Mourning; además de algunos buenos temas temas pop, como Where do we go from here?.
El tercer disco, también doble, llamado, por supuesto, Chicago III (1971), abundó en la misma línea que el anterior, y tiene también un buen nivel creativo, aunque es inferior a los dos anteriores. Incluyó también tres suites, entre las que destaca la poderosa An hour in the shower, cantada por Kath. No hubo, en este caso, ningún superhit, aunque el disco logró muy buenas ventas.
Decadencia creativa, Éxito comercial: 1972-1977 [editar]
Ese mismo año, la banda rizó el rizo con la publicación de un cuádruple álbum en directo, Chicago IV (1971), que no aportó realmente nada a su discografía. Su época de oro pareció claramente concluida con el disco Chicago V (1972) que, aún cuando contenía algunos buenos temas (Dialogue, A hit by Varese...) y algún hit remarcable (Saturday in the park), carecía ya del nivel creativo de los tres primeros.. Ese mismo año, se publicó otro álbum en directo, Live in Japan (1972).
Los siguientes años vieron cómo el grupo sacaba nuevos discos a un ritmo infernal (6 discos en 5 años). El grupo se había reforzado con un percusionista, Laudir de Oliveira, que ya había colaborado con ellos en algunas giras, y la producción seguía en manos de Guercio, pero su música fue perdiendo fuelle creativo, lo que no obstó para que mantuvieran un considerable éxito comercial, especialmente con su álbum Chicago X (1976), que contenía su más conocido hit: If you leave me now, una hermosa balada, cantada por Cetera, que fue un éxito a nivel mundial y motivó una nueva gira por Europa.
La crisis: 1978-1981 [editar]
En 1978, Guercio abandona definitivamente la producción del grupo, y la banda entra en una profunda crisis. Terry Kath muere de un disparo cuando jugaba a la ruleta rusa, y su puesto lo cubre el guitarrista Donnie Dacus. Los siguientes discos, Hot streets (1978) y XIII (1979), producidos por Phil Ramone, son un fracaso comercial y artístico, igual que el mediocre XIV (1980). Por primera vez desde la aparición del grupo, un nuevo disco de Chicago no entraba en las listas de ventas de Billboard, ni siquiera en los últimos puestos.
Musicalmente, la banda cae en una repetición monótona de esquemas, abusando de los sonidos Soft Rock, y clonando sucesivas baladas cantadas por Cetera, en un intento de reeditar el éxito de 1976. Durante la gira 1982-83, Dacus es sustituido por Bill Champlin, y el disco que se publica ese año, Chicago 16, vuelve a entrar en las listas de ventas. Así, parece terminarse la crisis.
=El Renacimiento: 1982 En 1982, lanzan Chicago 16 y su primer sencillo "Hard to say i´m sorry" alcanza el número 1 en Billboard y en otros listados de popularidad en el mundo. La banda así vuelve a posicionarse como uno de los grupos más populares de la unión americana.
La supervivencia: 1984-2007 [editar]
El disco Chicago 17 (1984) es el último que graba Peter Cetera, el cual decide abandonar la banda e iniciar una aventura discográfica de manera solitaria. Y el elegido, tras realizar numerosas audiciones, es Jason Scheff, quien se ajustaba a lo que la banda estaba buscando (un buen cantante, con un cierto toque "Cetera" y un gran bajista, hijo del bajista que solía acompañar a Elvis Presley). Algunos cambios más se producen en la década de 1990, año en que Danny Seraphine abandona el grupo y es sustituido por Tris Imboden. Algunos años después (1995), Keith Howland se une al grupo como guitarrista definitivo, al convencer al resto de la banda. Según declaraciones de miembros de la banda, desde la muerte de Terry Kath no habían encontrado el sonido ni el toque de guitarra que buscaban, hasta la aparición de Keith Howland; sonido que no habían encontrado en guitarristas como Donnie Dacus, Chris Pinnick o Dwayne Bailey.
En todo este período, Chicago sigue sacando discos con regularidad y realizando giras por USA. Los discos de estudio, desde luego, ya no tienen ningún interés musical, refugiados en su cómodo soft-rock, ni tampoco logran grandes ventas. No es el caso de los recopilatorios, que se siguen editando cada cierto tiempo y que logran mejores resultados comerciales.
El grupo sigue en activo en 2007 y con una agenda repleta de conciertos, debido a su nuevo disco de estudio Chicago XXX, un disco con ciertos toques, muy lejanos, del Chicago antiguo y en donde se reflejan esas baladas que son tan características de la banda.