Cada día leo en periódicos y redes sociales comentarios de extrañeza porque los países árabes productores de petróleo no han ofrecido asilo a sus correligionarios sirios o libios y estos se ven abocados a entrar en Europa sin ningún tipo de garantía nI ayuda tras perder sus casas sus trabajos y sus ciudades, pero la explicación tiene un nombre “Operación Caballo de Troya”.
De todos es sabido que los Estados Unidos han movido los hilos en todas la revueltas que han llevado al poder a los islamistas, primero en Irán, mas tarde en Irak y luego en Afganistán, ahora lo están maquinando en Siria y el Libia.
Los usacos han armado entrenado, financiado a todos estos grupos desde Bin Laden hasta estos mismos momentos, son guerras económicas destinadas a controlar una área estratégica como es el Oriente Medio, organizan y financian dos grupos extremistas, sionistas por un lado e islamistas por otro, y ya tienen asegurado por decenios un mercado para la industria armamentística.
Con el nombre de “Caballo de Troya” la Yihad está infiltrando entre los refugiados cientos de agentes terroristas que de otro modo no podrían atravesar las fronteras, pero camuflados entre los exiliados son casi imposible detectar.
Una vez en Europa, harán proselitismo, reclutarán nuevos miembros y provocarán atentados cuando se les exija, si dejamos que se extiendan, provocaran una metástasis que será imposible de extirpar, y cualquier noche, como en la vieja Troya, abrirán las puertas de Europa y acabarán con nuestra cultura y nuestra sociedad.
Que nadie entienda en este articulo un alegato en contra de los refugiados a los que se les ha arrancado de su tierra con la mayor brutalidad, ellos son las victimas inocentes de unos y otros como lo seremos nosotros si no tomamos medidas urgentes, como dijo Jesús, “Separad la cizaña del trigo y arrojad a ésta a las llamas”, espero que sepamos reaccionar antes de que la media luna tiña de sangre nuestros cielos.
JUANMAROMO