"Cualquier hombre de la familia puede pegar a la mujer"
Mejor morir
Afganistán sigue siendo uno de los peores lugares del mundo para la mujer. Un 87% son víctimas de maltrato, tienen el ingreso per cápita más bajo del planeta y una expectativa de vida de 44 años. El 57% de las afganas contrae matrimonio antes de los 14 años. Pakzad, considerada por el semanario Time una de las cien personas más influyentes del mundo y fundadora de la Voice of Women Organization, dio una conferencia en el Institut Europeu de la Mediterrània. Explicó que, en el 2006, 96 mujeres se inmolaron y en el 2008, 73. Cuando ascendió el número de divorcios, el de inmolaciones descendió, pese a que las familias afganas piensan que ella debe morir antes que pedir el divorcio.
Tengo 39 años. Nací y vivo en Herat (Afganistán). Estoy casada. Tengo tres hijas y tres hijos. Licenciada en Literatura. El mundo debería vivir en situación de igualdad, sin discriminación por sexo, color de piel, nacionalidad o religión. Soy musulmana
Conoció muy pronto la violencia.
A los 12 años fui testigo de un asesinato.
El de su maestra.
Sí, fue durante la invasión soviética. El grupo que luchaba contra el gobierno no quería que las niñas se escolarizaran. La directora tenía una mentalidad muy abierta y se negaba a usar el pañuelo, así que la mataron delante de las alumnas.
...
Al cabo de unos días atacaron el colegio con un cohete. Mataron a muchos niños, entre ellos a mi amiga, mi compañera de pupitre.
Eso marca...
Tenía mucho miedo. Habíamos pasado un año de luchas desde el inicio de la invasión soviética. Las continuas manifestaciones siempre acababan con sangre. Más de 4.000 personas fueron asesinadas en un día.
A los 14 años ya estaba casada.
En Afganistán, el porcentaje de matrimonios forzosos es del 80%.
¿Le gustó el hombre que eligieron para usted?
Creo que sí. Sabía que muchos matrimonios por amor en otros países se rompían. Si no es por la dote que el novio debe dar a la familia de la novia, no es una mala solución.
A los 15 años ya era madre.
Sí, pero es muy común en Afganistán, muchas de mis amigas fueron más precoces.
¿A los 29 años, con cuatro hijos, se rebeló?
Desde muy jovencita escribía en un periódico sobre cuestiones de la mujer: cómo criar a los hijos, la relación con la familia...
¿Y qué opinaba su marido?
Estaba orgulloso, él forma parte de mis éxitos, me apoya; si no fuera así, no estaría aquí. Y hay bastantes hombres en Afganistán como él, gente formada que cree en los derechos de la mujer.
¿Cuándo empezó a ser una mujer incómoda en su país?
Durante los seis años de gobierno talibán creé escuelas clandestinas. Vivía atemorizada por la posibilidad de que los talibanes irrumpieran en una de nuestras escuelas.
¿Ocurrió?
En dos ocasiones dos escuelas fueron registradas, pero lo teníamos todo muy bien planeado: en cada casa había un horno y junto a él un galón de gasolina para quemar todo el material de la escuela rápidamente. Y así lo hicimos.
Qué desperdicio.
Sí, pero sobrevivimos. Con el nuevo gobierno creé el primer refugio para mujeres en Herat y con los años he abierto más en otras regiones para todas esas mujeres que escapan de la violencia doméstica y los matrimonios de niñas forzados.
¿De qué edades estamos hablando?
De niñas de 9, 10 y 11 años. Nosotros les damos apoyo legal, psicosocial y formación profesional para que puedan defenderse cuando regresen a sus pueblos.
El regreso puede ser muy traumático.
Mediamos con la familia y le recordamos que es ilegal casar a las niñas antes de los 16 años, porque muchas familias no saben que por ello pueden ir a la cárcel. Intentamos formar a la comunidad.
¿Maltratadas por su padre, sus hermanos y luego por su marido?
Sí, eso es lo corriente. Cualquier miembro masculino de la familia puede pegar a la mujer, y lo hace. En las zonas rurales no hay ningún tipo de conciencia respecto a los derechos de la mujer. Es necesario cambiar la mentalidad de las comunidades.
¿El maltrato es tradicional en su país?
Las jóvenes generaciones que han crecido en la guerra, tres décadas y media, no han visto movimientos de mujeres, pero las viejas generaciones sí han visto la igualdad. De los años 70 hasta finales de los 80 las mujeres vestían como usted y trabajaban en todos los campos. Hemos retrocedido cientos de años.
En las zonas rurales el maltrato siempre existió.
Sí, pero no en el grado en que está sucediendo ahora. La pobreza crea muchos problemas de adicción, desarraigo, salud mental…: los hombres se vuelven más violentos.
¿Una mujer violada es juzgada por adulterio?
A las mujeres les cuesta mucho denunciar casos de violación porque ponen en entredicho la reputación de la familia, así que callan. Y en el caso de que queden embarazadas y no puedan abortar, ya que es ilegal y se necesita dinero para ello, los hijos, la familia y los vecinos las denuncian y las meten en la cárcel.
Terrible realidad.
Las mujeres siempre son víctimas responsables de la reputación de la familia. Y si han sido violadas y se deciden a denunciarlo, deben presentar tres testigos. Hay 110 mujeres en la cárcel de Herat por adulterio, la mayoría inocentes.
Usted está amenazada de muerte.
Constantemente. Siempre que tenemos un caso en el albergue, me llaman los hombres yme amenazan con matarme o raptar a uno de mis hijos. Hace un par de meses intentaron atacarme en un comercio; sacaron la pistola, pero había mucha gente y no estaban del todo seguros de quién era yo porque vestía el chador. Todo mi cuerpo temblaba.
¿Cómo se protege?
Cambio constantemente de coche, ruta y horarios. No comparto mi agenda con nadie y uso el chador para salir a la calle. Podría marcharme, ¿pero quién haría mi trabajo?