Los ves caminando por la calle, ausentes, pendientes de una micropantalla que les dirige, atropellan a los viandantes, cruzan semáforos en rojo e incluso chocan contra árboles o farolas. También puedes encontrarlos en lugares públicos sentados en la mesa de un restaurante cada uno con su monitor sin interrelacionarse ni tansiquiera mirarse e incluso en las salas de cine visionando su propia película. Son los nuevos autistas, los zombis del siglo XXI, seres prisioneros en su propia burbuja incapaces de abrirse al mundo exterior. Los fabricantes de robots lo tienen muy claro, es mucho mas fácil robotizar a una persona que personalizar un robot.
JUANMAROMO