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domingo, 14 de diciembre de 2008

LA PRIMERA DE SEGONA MÁ

En los años de mi adolescencia, cuando nuestras calderas estaban a punto de estallar, solo nos quedaba la opción del autoservicio o recurrir a una profesional. Las chicas de la época eran muy diferentes de las actuales, los codos por delante en los bailes apretados, los besos esquivos, los magreos clandestinos en un cine de barrio ...

Mi primera experiencia "completa", fue como la de tantos y tantos con una "Diplomada". Dieciseis tiernos años, me pasé la tarde del sábado pensando si me gastaba las trescientas pelas en un disco, o me estrenaba de una vez. No habia duda. Cuando la ganas de joder aprietan...



Un paseo por los bares de la calle Robador, en pleno barrio chino, viendo a la mozas subir y bajar por entre los sucios portales. Al fin una que me pareció digna de desvirgarme, joven, bien formada y con una mirada triste
-¿cuanto? - Trescientas y la cama aparte- ¿ya tienes 18 años? -Si claro ¿es que no se nota?.
Me lanzó una mirada condescendiente y me dijo,- sigueme.



Suvimos por una sucia escalera, al llegar a la primera planta, nos esperaba el segurata de la epoca. -Son 5 duros- , pagué y entramos en el cuartucho.



-Desnúdate, me dijo, mientras ella se quitaba la ropa a una velocidad de vértigo. Me sentó en el vidé y me hizo un lavado de bajos.- ¿Es la primera vez verdad? me dijo mientras me miraba con cierta ternura.
Me avalancé hacia sus pechos, pero ella me frenó diciendo- No apretes, con mucho cuidado, no quiero que me los soben. Me tendí en el catre, y se colocó sobre mi. Cuatro gemidos prefabricados y en un momento habia acabado la faena.



Salí a la calle y me fuí para la plaza real con una sabor amargo en la boca, me tome un tanque de cerveza con los cuatro duros que aun me quedaban y me fuí para casa. No volví nunca más, para mi fué casi como una violación, consentida, pero una violación de mi inocencia, de mis ilusiones de todo lo que me habia imaginado.

Por eso me siento tan identificado con esta canción, porque para tantos y tantos de mi generación, ella fué "LA PRIMERA, DE SEGONA MÁ"


Francamente
me hubiera gustado mucho más
que hubiese sido primavera
y que la primera
hubiera sido aquella muñeca rubia
delgada y pecosa
que cada tarde
subía conmigo al tranvía
cuando el día se dormía.

Francamente
me hubiera gustado mucho más
a tu cuerpo harto
de diez duros y la cama aparte,
pero esas cosas van como van
y en aquel tiempo no me dejaron elegir
y no me sabe mal
ni me avergüenza
que fuese en tu pila
mi bautizo de amar.

Fuiste honrada y sincera
y la primera,
de segunda mano.

Pero, francamente
me hubiera gustado mucho más
que aquel catre, un pajar
donde la primera
se hubiera dejado llevar con vergüenza
entre mentiras y un poco de ‘coña’,
e ir haciéndolo, sin prisas,
derramando ternura.

Francamente
me hubiera gustado mucho más
que hacer de aprendiz
mientras en la puerta esperan otros
sintiendo el olor
de alguien que estuvo antes que yo
y no me sabe mal
ni me avergüenza.

Eres parte de mi historia
y por eso puedo dibujarte
deseando bajar bandera.
Ay, la primera
de segunda mano.

Francamente
me hubiera gustado mucho más
que hubiera sido primavera
y fuera la primera
la continuación
de aquellas historias verdes,
romances tiernos,
que el hermano mayor mentía
sentado en la acera.

Francamente
me hubiera gustado mucho más.
Benévolamente,
le gustan vírgenes al adolescente,
pero, como usted,
se come lo que se encuentra por la calle.