Los delirios de grandeza con trasfondo electoralista que han caracterizado no pocas actuaciones de la Generalitat valenciana desde que la ocupa Francisco Camps se están viendo seriamente tocados por la realidad de la crisis. La Valencia liderada por el PP, que aspiraba -y aún aspira-a desbancar a Barcelona como punta de lanza del arco mediterráneo sin reparar en medios para ese objetivo, no ha tenido más remedio que dar por insostenible la continuidad de uno de sus proyectos estrella, la organización del Gran Premio de Europa de fórmula 1, porque le genera un déficit de más de 20 millones de euros anuales.
http://www.elperiodico.com/es/noticias/opinion/20101119/camps-ecclestone/592005.shtml