Silencio, guarda silencio. Que la noche se asusta si tus palabras se crecen.
Silencio, guarda silencio. Que la luna gemirá para acompañarte y los luceros harán pucheros.
Silencio, guarda silencio. Que mi voz viene empujando una canción de leche caliente y miel para endulzarte los sueños, haciéndote descansar bien.
Silencio, guarda silencio. Que los miedos se han marchado por un camino de plata que bajaron las nubes al despedirse para ahuyentarlos, y no te dieran la lata.
Silencio, guarda silencio. Que aquí tienes mi regazo para tu cabecita adorada, apóyala suavemente y escucha mi corazón que te siente agarrotada.
Silencio, guarda silencio. Que si prestas atención, mis latidos cantarán a los tuyos como cuando aún eras sin ser, pero ya eras ilusión.
Silencio, guarda silencio. Que si apuras los minutos en lágrimas perladas que no saben donde ir, me dejarás apenada y lloraré junto a ti.
Silencio, guarda silencio. Que el sueño ha aparecido con su bolsa de deseos, con su risa, con sus duendes que en la cama se han metido.
Silencio, guarda silencio. Que los duendes juguetones de los cuentos, son traviesos, simpáticos, zalameros, golosos y aventureros. Más sólo quieren jugar en el mundo de los sueños.
Silencio, guarda silencio. Que ya corretean felices por los senderos floridos. Cierra los ojos mi niña que yo viajaré contigo. Jugaremos a pillarlos entre flores perfumadas y al sentirnos muy cansadas, nos tomaremos un te, con nuestras queridas hadas.
Silencio, guarda silencio...
"El niño reconoce a la madre por la sonrisa"
León Tolstoi.
"La madre es nuestra providencia sobre la tierra en los primeros años de vida, nuestro apoyo más firme en los años siguientes de la niñez, nuestra amiga más tierna y más leal en los años más borrascosos de la juventud"
Severo Catalina.
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