A ti, hijo de la manada que te jactas de tu hombría, que afirmas entre sonrisas que "ella" disfrutó mas que tu, a ti que te escondes en la jauría para vomitar tus bajos instintos.
Un día te invitaré a una copa en una terraza de noche y cuando estés relajado, vendrán cinco de mis colegas y te harán beber hasta llegar al delirium tremens, te dejarán tirado en una calleja, te robarán el movil y colgarán su hazaña en la red.
Si osas denunciarme, llevaré una grabaciones en las que se te ve tomando copas con tus compadres y le diré al Sr juez que disfrutaste como un loco mientras te metíamos cubatas hasta por el culo y cuando estés en el hospital con el hígado deshecho, vendremos a filmarte para colgarlo en el grupo. Recuerdo la primera escena de "El padrino" , ese padre que ruega a Don Corleone que haga justicia a los violadores de su hija, si esta muchacha de Pamplona fuera mi hija, te aseguro que no tendría que recurrir a nadie para que te arrepintieras para toda tu vida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario