HOGUERA DE ODIOS

Mientras existan las religiones, la injusticia, la desigualdad y la incultura, mientras no se respete a la naturaleza y a la vida, mientras se pague odio con odio, violencia con violencia y armas por petroleo seguiran cayendo bombas sobre los hospitales y sangre sobre las ciudades. El miedo a la muerte no sirve cuando se ha perdido el amor por la vida, hemos creado un mundo enfermo y una sociedad podrida que acabará envolviendonos en nuestra propia mierda. Todos somos culpables, unos por enriquecerse con la venta de armas, otros por consentirlo y nosotros por mirar hacia otro lado, cada bomba, cada metralleta, cada barril de petroleo comprado con sangre es una mecha prendida que un dia estalla en un campo de refugiados, otro en un hospital y hoy ha estallado en un paseo de Niza, han matado al conductor, como mueren casi siempre los terroristas, pero eso no les frenará porque el odio y el fanatismo pueden mas que el miedo a la muerte, La historia se repite, siempre ha habido suicidas y kamicaces, pero los actuales ya no actuan contra un enemigo, actuan contra la humanidad, tanto los que lanzan misiles contra hospitales como los que se inmolan en un coche bomba, pero sobre todo, los que manejan esos billetes manchados de sangre y que salen en los medios de incomunicación admirados y envidiados. No habrá paz mientras no haya justicia, y esta sociedad es cada vez mas injusta.