Lo que nos estamos jugando en estas elecciones no es un presidente de gobierno, ni un partido en el poder ni los componentes del parlamento, lo que nos estamos jugando es la dignidad de un pueblo . Si después de padecer el gobierno mas corrupto, incapaz y depravado de la historia, si después de sufrir los peores recortes sociales desde el franquismo los padres de los jóvenes sin trabajo, sin estudios y sin perspectivas de futuro continúan votando a sus verdugos, si los trabajadores reducidos a la esclavitud, los enfermos ignorados y postergados y los jubilados cuyas reservas se gastan en comprar deuda siguen a los flautistas que les conducen hasta el precipicio, es que nos lo merecemos todo como pueblo y como nación.
Como esta madrugada se confirme el triunfo de la derecha cuaternaria, del capitalismo genocida y del suicida conformismo, yo reniego de una nacionalidad y de un pueblo borreguil, ignorante y timorato.
La frase de “Mas vale malo conocido que bueno por conocer” debería haber sido el eslogan del partido en el gobierno, pero lo conocido no es que sea malo, es lo peor de lo peor, sin embargo el miedo la ignorancia y la incultura conducen al rebaño hacia el matadero, y luego se sorprenden de que eliminen la filosofía y las humanidades de la enseñanza, un pueblo que olvida su pasado, está condenado a repetirlo, y en este país llevamos siglos girando en la misma noria.
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