Los milagros no existen, desconfío de todos los productos que nos pretenden vender como milagrosos y de resultados fulminantes, para cada veneno existe un contraveneno y a veces simplemente es una cuestión de dosis. Desintoxicar el organismo es un proceso lento y costoso, es necesario tiempo, voluntad y perseverancia para obtener resultados, he aquí una de las razones por las que tantos y tantos pacientes fracasan en sus tratamientos acostumbrados a la pildocultura y a la pastillitis son incapaces de entender que destruir un edificio es mucho más sencillo que reconstruirlo y que primero hay que empezar por los cimientos.
No solo hay carroñeros en la farmafia, también los hay en la medicina alternativa, terapeutas sin preparación, homeopatas de revista y vendedores de milagros por Internet, si alguien te ofrece resultados inmediatos y deslumbrantes hazle "vade retro". Si en verdad queremos sanar, empecemos por librarnos de complejos, prisas y prejuicios, la sanación es posible, aunque el camino sea largo y dificultoso, solo hay que saber encontrarlo y seguirlo sin prisas y sin perdernos por atajos, como dijo Jesus, muchos son los llamados, pero pocos los que escuchan la llamada.
JUANMAROMO
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