viernes, 12 de diciembre de 2014

¿PAZ EN LA TIERRA?

La generosidad no consiste en ceder lo que nos sobra si no en compartir lo necesario, compartir nuestro tiempo, nuestro espacio, nuestra atención, no solo tenemos hambre de pan, también tenemos hambre de cariño, de comprensión de ternura.
Es más fácil arrojar unas monedas en las manos de un hombre que tomarle esas mismas manos y mirarle a los ojos, hacerle sentir que no es una alimaña. Cada día me tropiezo con más personas recogiendo comida en los contenedores, durmiendo en los cajeros, vivaqueando en los parques, hombres y mujeres con la mirada perdida que arrastran sus pisadas y sus esperanzas por un caminos de zarzas y me siento culpable de tener un techo donde dormir y un plato caliente en la mesa. 
Esta celada que hemos dado en llamar crisis, nos ha despojado a todos, a unos de sus casas, a otros de sus trabajos y al resto del coraje para no tomar las antorchas e incendiar los palacios de invierno donde se refugian los zares de siempre.
Cada mañana, cuando me miro al espejo, pienso cuanta miseria me tocará soportar, cuantas miradas vacías tendré que aguantar hasta bajar la cabeza, cuanta infamia, cuanta mentira y cuanta crueldad travestida de púrpura podré ignorar hasta que se me rompan las compuertas del alma y toda la ira, la rabia y la violencia se desborden calle abajo.
Se acercan la navidades, otras navidades que no serán blancas, que serán grises para unos, negras para otros, y para algunos, estarán teñidas de sangre.
Juanmaromo

1 comentario:

RESISTENCIA ANTIESPAÑOLA dijo...



No aceptaste la vergüenza.
Resististe.
Sacrificaste tu vida
por la Libertad, Justicia y Honor.





( Del Memorial en Honor a la Resistencia )