Últimamente, respondiendo a las quejas de Cataluña sobre el
déficit fiscal, la comunidad de Madrid alega que es la más solidaria por la diferencia
entre el dinero que ingresa y el que recibe del fisco, pero esto es una
falacia.
Cuando se produjo la privatización de los monopolios, todas
las sedes quedaron establecidas en Madrid, aunque su actividad se generara
mayoritariamente fuera de la comunidad, así tenemos ejemplos como el de ENDESA
cuya facturación se produce el 70% en Cataluña, pero paga el impuesto autonómico
en la capital. Telefónica, Repsol, Enagas, TVE y casi todas las cadenas
privadas de radio y TV son un claro ejemplo del desfalco fiscal que esta
política supone para las otras autonomías, ya que ellas demás no reciben ni un
euro de las actividades que generan, ya sé que con algunas multinacionales con
sede en Catalunya sucede lo mismo, pero el ejemplo no es equivalente, porque
estás empresas tienen su producción mayoritariamente en territorio catalán.
La
capitalidad supone para Madrid una entrada ingente de ingresos que provienen de
otras autonomías y que de alguna manera debería compartir con el resto del país.
Uno de los ejemplos más sangrantes de la
discriminación del estado a favor de la capital, es en obras públicas, fomento
invierte un 70% más en la comunidad de Madrid que en Catalunya, la mayoría de
la autopistas o autovías catalanas son de peaje o financiadas por La
Generalitat, porque el estado no invierte absolutamente nada en
infraestructuras. La Sra Aguirre y sus sucesores podrían tener la honradez de
explicar estos datos al resto de España en lugar de dárselas de generosos y seguir
chupando del bote.
JUANMAROMO
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