miércoles, 16 de diciembre de 2009

RUMOR DE OLEAJE

Me voy con el aquí y el ahora en los labios
de una revoltosa pasión que no imaginaba.
Amanece de a poco y ruborizado te pienso
mientras el todo terreno de mis ansias
atraviesa el límite de la noche y de vuelta te trae.

¿Qué hace mi lago sin parca lluvia ni paraguas?
Mi lámpara de incienso froto
para ir en humo tras tu fresca candela.

¿Habrá un corazón de hombre para esta elipsis?
¿Una tozuda respuesta a esta soledad?
Cuando torne a mi silencio
rogaré a tu delicado salvajismo,
el ritual de tus lozanas embestidas.

Mi lago emprende osada expedición tras el clímax
y te amo mientras te escribo estos versos.

Como sombra mis manos estiro
henchidas de polvo y ceniza
hasta tocarte y oír el rumor de tu oleaje,
como si por vez primera 
te sumergieras entre mis aguas.

Te amo y mañana serás medialuna
para hartazgo del silencio.
Pero aún tu voz suena a besos,
y me desboco en precipicios
por devorar tu aurora.

Ahora tuyo es mi deseo
y el tuyo miel entre los parasoles del alma.
Nada puede impedir que nuestros designios de octubre
enmielen los cielos mas forasteros
de nuestros cuerpos fugaces.

Acabo de llegar al gozo de mi corazón
y a gritos exijo tu rubor que sabe a "te amo".
Ya he tomado aliento, ya estoy sobre las sábanas
ven, ahora quiero saborearte una vez más en mis adentros
.

Por Lina Zerón

1 comentario:

Anónimo dijo...

genial como siempre Lina y gracias por el PDF