INSTINTO BÁSICO
"Es que Oscar, con mujeres de cierta edad no se juega".
Que poco imaginaba yo, que a las pocas semanas de que me dijera esta frase, le fuera aplicable a la misma interlocutora que me lanzó la amonestación. No, nunca jugué con ella aunque pensó que sí. Bueno, nunca, nunca, es decir mucho, pero tan nimio que no cuenta, estoy hecho así.
Es difícil encontrar a alguien con quien simplemente entenderse. Vosotros no sé, pero a mi me escasea bastante. Si además se trata de alguien del sexo contrario es que ni por asomo, vamos. Me enseñaron a resolver ecuaciones diferenciales, pero no me dieron nunca un coño de mapa para orientarme. Las agujas de marear que veo que utilizan mis semejantes me parecen antiguas o huecas o, y a menudo, trucadas por quien persigue sus propios intereses. Los que es a mí, no me sirven. Y he tenido varias. Me veo como aquel ciego, que al final de una película de Akira Kurosawa, perdía el bastón al borde del precipicio.
Y así se aprende en este valle, por prueba y error, sin que sirva la experiencia ajena y sin hacer caso a los mayores. Se reinventa cada día la rueda.
Raro es encontrarte en este viaje a ninguna parte a alguien que sin verlo como tú, lo percibe como tú. Alguien que aprehenda lo que se halle con un sentir similar. Alguien al que, de una lejana y larga conversación, se le queden las mismas oraciones. Alguien que reconozca en un poema medieval la intemporalidad de la persona.
Pero hete aquí que la evolución no ha acabado su trabajo. Podemos viajar con la mente al otro confín del universo, pero nuestros pies deben moverse acompasadamente para ir a la vuelta de la esquina. Aún tenemos debajo del neocórtex un entramado de instintos que imponen sus básicas reglas y decretan comportamientos. Están diseñados para llegar a ver el amanecer del próximo día, no para extasiarnos con él.
Y todos los milenios de memoria genética pueden más que un acercamiento intelectual. Un contacto íntimo, sí, pero sólo eso. Nada menos que eso. Y lo que me defrauda no es una foto que nunca fue, es esto.
Está ya dicho y por triplicado, lo que no puede ser, no puede ser, y además es imposible.
Oscar
No hay comentarios:
Publicar un comentario