¿Y qué es para ti lo más importante en este momento? -le pregunté.
Su respuesta fue la más bella y profunda que he escuchado en mucho tiempo.
-Volver a nacer.
Nacer nos lo dieron hecho. Ni lo decidimos ni lo quisimos; ni tan siquiera lo supimos. Somos los supervivientes de la decisión o improvisación de nuestros padres.
Renacer es algo que sólo puede hacer uno mismo y para sí mismo. Es una determinación responsable y profunda por la que decidimos rehacernos, unas veces para darle un giro importante a nuestra vida, en ocasiones para masajear una ilusión dormida, incluso para algo tan pequeño e importante como recuperar la sonrisa extraviada.
Haber nacido sirve para estar. Renacer sirve para construirse.
Renacer es posiblemente el proyecto más ilusionante de nuestra vida, porque hay mucha potencia y amor propio en el hecho de decidir parirse a sí mismo. Hay energía y deseo, que son los dos brazos para izar y dejar que ondeen las neuronas. No nos hacemos preguntas con preservativo: nos las inseminamos. No nos importa el esfuerzo: todo lo sostenemos.
Y al final, a veces, no siempre, lo logramos: somos nuevos de nosotros mismos. Vemos otros paisajes, oímos nuevos sonidos, olfateamos otros ambientes: sentimos distinto porque un día decidimos rehacernos.
El fin de año y ahora, tras las vacaciones, parece que son dos momentos en los que muchos plantean su propio renacimiento.
Ángela Becerra
2 comentarios:
Me gusta mucho la imagen.. me llama mucho la antencioon..
Y el texto.. tam bn
me encata.. en la frase VOLVER A NACER.. tam bn es un tema q canta Chayanne...
verdaderamente los seres humanos tenemos que renacer cada dia porque cada dia es distinto. la vida nos brinda esta nueva oportunidad en cada momento...asi que si existimos, aprendamos a renacer.bs.
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