Hace unos días, me dedique a visitar a Ídolos y amigos de los cuales hacia tiempo no tenia noticias, y el panorama no pudo ser mas desolador. Paginas vacías, blogs desaparecidos, bitácoras frías llenas de telarañas, me dio la impresión de estar recorriendo las calles de un cementerio, mausoleos con flores secas y fotos descoloridas por el tiempo.
“Erase de un marinero, que hizo un jardín junto al mar y se metió a jardinero….”
Blogs abortados al poco de ser engendrados, otros muertos por falta de afecto, algunas bitácoras suicidas asqueadas por la soledad y el desencanto, abducidas por el vacio y la nada.
¿Adónde habrán ido las ilusiones de esos marineros que estando el jardín en flor, se fueron por esos mares de dios?... Dejaron que el vergel se marchitara y ahora solo son camposantos de las ideas muertas, de los relatos no natos, de las músicas enmudecidas por la nada.
Todo lo que nace, debe morir, pero el dia que mis blogs se agoten, los borrare de la faz de la tierra, no quiero cruces maltrechas ni esqueletos de elefantes semienterrados, los meteré en una botella, y los arrojare al océano eterno del recuerdo.
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